El otro y uno de ellos

Y

esparcido, se logro impregnar en las murallas craneales
y golpeo  las ilachas de mis dedos rotos.

YY

Yo los vi llegar tomados de la mano,aun no logro decifrar si alguno de ellos mentía, pero algo inverosimil flotaba a la par, con sus pasos cordinados.
estacionaron sus cuerpecitos a mi costado izquerdo, apoyados en un poste de luz enfrente de la vereda de santa cruz.

uno de ellos sube su mano hasta la mejilla del otro.el foco parpadea
la calle esta oscura y hedionda.

uno de ellos acerca la cabeza lentamente,
el otro realiza un movimiento  audaz hacia la cintura contraria.

(desde mi oscuridad se divisan las dos siluetas bañadas por la luz sucia de un farol nocturno)

responde al movimiento con el adelanto de su pierna derecha.
un conejo corre a unos metros de sus pieses nerviosos,no se percatan.
con los labios pegados,uno de ellos mueve su mano izquerda hacia su bolsillo trasero,sigiloso como una serpiente
el otro no se percata
el reflefo de una navaja aturde mis pupilas liqidas.

YYY

a un fiambre
le cae la sangre
las yenas mueren de hambre
y los cocodrilos
miran la vereda manchá